Estoy de acuerdo en la separación entre los productos necesarios y los que no lo son (básicos y de lujo).
De momento en Altaria hemos estado tomando como ingreso adicional el precio de los bienes necesarios para la población, que obligadamente deben comprar. Por ejemplo, el precio del alimento es de M$2 el kilo, y si toda la población en su conjunto debe consumir 210 millones de kg. por semana (3 por día; 21 por semana, por 10 millones de habitantes), el ingreso de dinero proveniente de la venta de alimento es de M$420.000.000 por semana. Esto se puede distribuir en un futuro entre los comerciantes que se dediquen a este negocio.
En cuanto a los elementos de lujo, se puede medir el éxito de su venta según la cantidad de dinero que queda a los pobladores en cada mes; en Altaria, pese a que la enorme mayoría de la población está desempleada, medimos la cantidad de dinero que gasta una persona entre gastos para mantenimiento e impuestos durante un mes, y lo comparamos con el sueldo mínimo. Suponiendo, por ejemplo, que el sueldo mínimo sea de M$1200, y una persona gaste por mes M$800, quedan M$400 para gastar. En base a esta cantidad las personas podrán darse más o menos lujos. En esto influye la economía nacional; si una micronación tiene una economía bien sostenida por el comercio, y no es necesario cobrar mucho dinero a los habitantes, éstos tendrán más dinero disponible para gastar. En cambio, si se cobran altos impuestos y precios elevados, las personas serán pobres y apenas tendrán para subsistir.
Este plan todavía no se ha llevado a la práctica, ni siquiera está legalizado, pero es una idea para aplicar más adelante, cuando se produzcan elementos que no son necesarios para subsistir, y quizá sirva de ayuda.